EL TEATRO DE IBSEN Y LOS ANARQUISTAS

 Henrik Ibsen está considerado uno de los autores más influyentes en la dramaturgia contemporánea, uno de los padres del drama realista y del teatro simbólico; sus obras, todavía hoy, siguen representándose y llenando salas de teatro, por lo que es justo reivindicar a los primeros que supieran ver la hondura de sus transgresores dramas sociales.
El dramaturgo y poeta noruego, antes de que se pusiera de moda en España, ya fue apreciado por lo anarquistas debido a que encontraban en su obra muchos elementos con los que se identificaban. En la imprescindible obra de Lily Litvak, Musa libertaria, se afirma que los ácratas consideraron el teatro, como parte del arte y la cultura, como portador de mensajes y un medio para comunicarse directamente con el pueblo. Esta consideración del teatro como un instrumento social y transformador, expresión crítica de la realidad y capaz de resolver sus problemas, llevaría al pueblo a una identificación con la escena que jamás alcanzaría una intensidad mayor que con los anarquistas.
Si el teatro poseía ya una base popular, los libertarios se esforzaron en ampliarla. Buscando siempre un público entre la clase oprimida que se identificara con las reivindicaciones mostradas, las representaciones se acompañaban de todo tipo de actividades paralelas en las que se pudiera interactuar, y convertir así el teatro en jornadas dinámicas y recíprocas: publicaciones, conferencias, discusiones, música… Estas actividades recogían la idea del teatro del anarquista francés Jean Grave, el cual apostaba por grupos creadores libremente asociados, que darían lugar a una estética libertaria enfrentada a las representaciones profesionales y comerciales. Esta visión de Grave es, a su vez, deudora de sus maestros Kropotkin, y su consideración de agrupaciones creadoras, y Wagner. Se dieron también numerosos trabajos de estética y sociología teatral, bibliotecas que publicaban obras teóricas y ediciones baratas de autores como Ibsen, así como publicaciones especializadas casi de forma exclusiva en el teatro.
Una de estas publicaciones fue Avenir, cuyo primer número apareció en marzo de 1905, dirigida por Felip Cortiella. Años antes, Cortiella había fundado un grupo teatral en Barcelona, que representó Casa de muñecas en castellano y por primera vez en España. A pesar de la indiferencia de la clase media, los obreros la aclamaron con entusiasmo. Como subraya Litvak, esta introducción de Ibsen en España se produjo antes de la labor ibseniana del dramaturgo y empresario Adrià Gual en el Teatro Intim y, como hemos dicho anteriormente, antes de que el autor noruego estuviera de moda. Por ello, hay que decir que el anarquista Cortiella es el auténtico promotor de Henrik Ibsen como dramaturgo social. En 1903, Cortiella, junto a sus compañeros Joan Casanova y Pere Ferrets, funda el Centro Fraternal de Cultura, en el que se reunía lo más avanzado del movimiento obrero. Se organizaban jornadas musicales, conferencias científicas y artísticas, representaciones teatrales, se creaban grupos de afinidad con las consecuentes excursiones, y se formó una importante biblioteca en la que se prestaban libros a los trabajadores.
El Centro Fraternal de Cultura tenía como objetivo primordial la formación cultural, y la propaganda ideológica era una lógica consecuencia de ello. Precisamente, uno de los nombres de las agrupaciones teatrales creadas en este movimiento obrero y cultural de carácter libertario recibió el nombre de Ibsen. De uno de sus fundadores, Albano Rosell, son las palabras según las cuales la idea era hacer “un teatro nuestro de ideas, de vibración social, de combate y de lucha”. La agrupación Ibsen comenzó su actividad con la representación de una obra del autor noruego, Espectres. Naturalmente, a todas estas personas, junto a las inquietudes culturales y formación de los obreros, les preocupaba igualmente la educación de la infancia. Es el caso de Rosell, el cual combinaba sus actividades teatrales con su labor de profesor en la Escuela Moderna de Ferrer, haciéndose cargo en 1904 de la Escuela Moderna de Mogat, fundando en 1906, en Sabadell, la Escuela Integral y la revista Cultura. Entre su numerosa obra escrita, destacaEl teatro y la infancia, en la que considera el teatro como uno de los mejores medios, además de divulgación artística, de propaganda, de crítica y de orientación ética y filosófica para los chavales; del mismo modo, lamenta en este texto teórico la mercantilización de la actividad teatral y se esfuerza en liberarlo de toda especulación empresarial.
Por lo tanto, entre los autores preferidos por los anarquistas, con obras que reflejaran los problemas sociales y modernos, estaba Ibsen y, en concreto, su obra Un enemigo del pueblo. Hay que decir que, a pesar de ser el anarquismo una de las corrientes decimonónicas del socialismo, si esta obra gustó a los libertarios fue por su defensa del individuo, el cual desea realizarse plenamente al margen de toda coacción social. Estamos hablando de unas ideas que extienden su concepción de la libertad a lo social, por supuesto, pero siempre sin imposición alguna, y esa defensa conjunta del individuo y de la justicia social resulta encomiable. Muy importante resulta esta cuestión para recordar a los que quieran reducir a Ibsen a una mera lectura liberal. Un enemigo del pueblo se estrena en 1893 por parte de la compañía Tatau en el Novedades de Barcelona, un hecho considerado crucial para el nacimiento del teatro obrero. Frente a la extrañeza de la prensa burguesa del éxito de esta obra entre los trabajadores, en la que el protagonista arremete contra el populacho y cuestiona el sufragio universal, la crítica de El productorvendría a poner las cosas en su sitio publicando la siguiente reseña:
 Ibsen es el Hércules que arremete decidido contra todas las farsas, todos los convencionalismos, todos los bastardos intereses, levantando sobre tanta ruina el mundo nuevo, con su moral y justicia y ciencia positivas.
Se denuncia así la visión burguesa, interesada y reduccionista, y se alaba al autor noruego con su filosofía, su ciencia y su calidad escénica, la sencillez y naturalidad de su dramaturgia, y la justeza y realismo de sus protagonistas, “porque son reales, y son simbólicos, porque cada tipo representa toda una clase, toda una institución”. Se critica, en definitiva, “el arte por el arte” y se reclama un mayor horizonte para la representación teatral, tal y como realiza Ibsen, con el que los anarquistas se identificaron plenamente:
Todo cuanto los anarquistas hemos dicho, aparece en la obra, a veces con una sola y elocuentísima frase… Por eso resultó la producción para nosotros un verdadero acontecimiento, un acto de los nuestros, con la gran cualidad de revestirse con la más bella envoltura artística… así acuden los trabajadores al Novedades a sostener la obra con sus aplausos contra el significativo mutismo.
Las representaciones siguientes de Un enemigo del pueblo, por parte de otras compañias, serían siempre una acontecimiento para la clase obrera. Incluso en Madrid, y a pesar de alteraciones en la obra original y la indiferencia entre la clase media, fue siempre apoyada por los trabajadores. En La Idea libre, otra publicación ácrata, se publicó un artículo llamado “El anarquismo en el teatro”, en el que se mencionaba a Ibsen como prueba de que grandes autores se acercan, de forma consciente o inconsciente, al ideal ácrata.
Junto a Un enemigo del pueblo, no dejaron de tener éxito entre los obreros otras obras del noruego como RosmersholmSpectres y la propia Casa de muñecas. Esta obra fue representada por Cortiella en el Teatro Circo Español con el título de Nora (nombre de la protagonista), y a la entrada se regalaba al público un número deTeatro social, con el retrato y la biografía de Ibsen, un estudio del drama y un artículo sobre el teatro y los anarquistas. Todo eran encomiables y productivos esfuerzos por poner el medio al servicio de la emancipación social. Incluso, las obras de Ibsen ofrecidas en teatros burgueses eran reseñadas en los medios libertarios, ya que se consideraba lógico el éxito de la obra del noruego, al igual que lo es la imposición de una verdad científica.
Se consideraba que un teatro sociológico ayudaba también a comprender el progreso científico y lógico de la sociedad hacia una organización más perfecta. Es por eso que tanto gustaba Ibsen, tal y como publicó Teatro social: “ha despertado inteligencias, ha emancipado, ha hecho más: ha creado un teatro sociológico”, Ibsen dejaba al espectador “el campo libre del dogmatismo para que pueda representar a su antojo el proceso evolutivo de la sociedad futura”. Tal y como sostiene Litvak, esta actitud científica de los libertarios no les hace subordinarse al naturalismo, a la reproducción fotográfica y verídica del mundo, ni caer en un rígido realismo. Aunque los anarquistas se consideraban a sí mismo realistas, en su labor existe siempre un propósito social, un deseo de expresar el ideal subyacente en la realidad.
Capi Vidal


Mi arte mi revolución

EL ARTE ES MI REVOLUCIÓN


No digo aquí que la revolución sea una corriente artística, ni que el arte sea una via meramente revolucionaria, no digo que  con él vaya a cambiar las condiciones existentes , ni que en él  este el caliz  sagrado,  el santo grial  de la lucha, no desprestigio las otras  formas  y tampoco me olvido de quienes han llevado a cuestas  luchas sofocantes,  desde lo más anónimo y más  común y han  sido muestra  de gran  admiración y nobleza,  no digo que lxs artistas sean seres especiales ni un  gran  brazo armado  de las ideas,  lo que digo es que es mi manera personal de implosionar y explosionar las contradicciones que  en mí habitan,  tampoco creo en él  como una  especialización  y profesión de gran status, pero si  creo que merece y es digno de gran exigencia, dedicación  perseverancia y  una  lucha constante  con el lenguaje,   creo  advertir en él una via de comprensión de las múltiples dimensiones  que pueblan el ser,  una manera y a la vez una cura de encarar  sueños, angustias y dolores, un caudal   para  derramar odios, amores y deseos,  y una  fuerza en potencia  que escupe y describe las contradiciones humanas, las huellas reales y tangibles  que deja el poder en nuestrxs  cuerpos y mentes; el cuerpo  como primer territorio a recuperar, que ha sido magullado por la historia, por el género   por los  roles sociales,  es el primer  territorio que debemos hacer nuestro. Nuestra mente el lienzo  donde se esbozan nuestros sueños de liberación.
Quiero arte para expresar  esos  deseos  anárquicos e indómitos.

Quiero arte  para derribar los muros en mÍ creados; candados cerraduras y rejas.
Quiero arte como motor de unión  de  comunidad, resistencia y pasión.
Quiero arte como motor de individualidad, de lo único y genuino, de lo más íntimo.
Como lugar para batallar a dogmas   y  normas.

El lenguaje está en crisis, los pilares de las sociedades están en crisis, y no hacemos más que girar en las ruedas,  formas y reformas que se nos entregan, tratamos de criticar  el mundo  con las mismas palabras que aquel mundo nos ha insertado,  quiero arte no artistas,  quiero  fuegos  provocadores en cada unx de nosotrxs .
y  si , lo veo  como un motor de lucha,  asi como existen panfletos,  historias,   filosofías  sociologías  pienso que el arte las puede contener a cada una de ellas,  no arte como elite, tampoco  como vanguardia,  tampoco  como  profesión  revolucionaria.
  continuamos siendo  yo,  tu,  aquel.. andando a pie,  esforzándonos en nuestras forma de sentir,  palpar y  derribar la realidad,  a la mano del campesino que labra la tierra,  esa  que cada vez esta más deteriorada y privatizada,  puede ser  un fin individual  con el que  dialogues con tus monstruos y tu rabia,  pero no basta solo  con él, este mundo golpea fuerte y abofetea hiriente y nos lesiona de una manera poco  estética y artística, es frio y cruel, así que no quiero que el arte camufle esa realidad,  y sé que hay quienes enfrentan esa crudeza desde las cicatrices,  golpeando donde   duele, el arte como símbolo y representación puede ser ambiguo, y fácilmente  absorbido por la institución, también puede ser  simple slogan, publicidad política revolucionaria y pagada,  por si solo  es capaz de  crear hologramas de la revolución  pero nunca será ella, la revolución la haremxs  todos  y cada uno   de los que  ya estamxs hartas, cansadxs,  quienes seguimos la ceremonia de un pasado caduco y nos vemos por ella aprisionadxs.

Un arte renovador y fresco  instigando a las mentes a preguntarse y criticarse a transformarse y esto se logra con entrega,  con creencia y  convicción  de  qué se es  y para que,  aunque  nunca  determinándole un  cierta utilidad mecánica y automática.
 Arte como historia, como presente como fuerza como lucha como comunicador como inútil  como reivindicativo  como fantasioso  como espiritual como material,  pero nunca pedante, nunca como slogan,  ni siquiera como movimiento, puede ser  acompañante visibilizador de lo que hay  como instigador a la acción, y es en sí  acción al  tiempo,  como soportaríamos el mundo sin ese resquicio delirante donde  revolver las consonantes de estos parajes interiores, donde   dejar volar  nuestra imaginación sin necesidad de  empeñarnos a los mundos de  walt Disney, holliwood y el capitalismo cultural?
El arte es habita una  dimensión cuya fuerza es la   insurrección interna, para ser al tiempo un instigador de la insurreción externa, hasta que la línea entre las dos sea difusa y traspasable.

Asi como no es pequeño- burgues rechazar los productos de origen animal señalando el antiespecismo  como una lucha superficial porque no atañe a las necesidades humanas,  tampoco creo que sea  pequeño- burgues dedicarse a hallar nuevos lenguajes que derriben los símbolos formas y representaciones de una civilización edificada por la fe en la razón , el progreso y la devastación.
 No quiero que determines cual es la necesidad  básica humana,  cuando  noto que se trabaja para comer  pero nunca se come, o no interesa, cuando veo que en condiciones precarias de techo y comida se  preocupa más es por estar en la onda cultural y de espectáculo, cuando la tecnología  camufla nuestro vacío existencial, el amor se vende, la lealtad se compra,  necesitamos es un cambio intimo humano,  darnos cuenta de que ni dioses,  ni religiones ni estados  llenaran ni suplirán  nuestras preguntas.
 no me encasilles, no me digas de que manera tengo que luchar, o cual es la más pura o necesaria, cuando noto que todo se interrelaciona, y aunque el arte y el mensaje para algunos es slogan y marketing,  son   sustitutos de identidad o son definiciones de etiqueta,  de figurar y de reconocimiento, para otrxs en cambio son palabras sinceras, son mensajes sinceros  son humildad proyectada con el fin de compartir, que el estado  y el espectáculo no sea quien defina lo que es el arte, que no lo haga la historia, seguiremos cantando, pintando, actuando y escribiendo,  como goce personal, como desahogo  social, como pasión ancestral,  una lucha contra los policías internos, un delirio, el puño en alto de la locura, la voz de lo acallado,  y no consumo popular y revolucionario. No repetición vana de  letras e insignias que nada cambian.
No arte  como producto , sino como un proceso constante, como creación militante, como hallador de formas  a los diversos  contenidos que nos  conforman,   rompiendo los cercos  con los que nos conformamos para deformarnos y esbozar los surcos que nos  subleven, no necesitamos  el espectáculo  para  hacer más amenas nuestras vidas lo podemos hacer nosotrxs mismxs  y de forma más sincera,  no necesitamos sus  vacías  formas de diversión, también nosotrxs las podemos crear, diversión no evasión,  podemos  recuperar las músicas ancestrales, también  crear las nuestras y hacerlo bien, no queremos ser  simplemente  producto  y respuesta al sistema superando los modelos con los que nos comparan y los cuales imitamos para ser definidxs y aceptadxs .  La lucha se manifestara en todos los ámbitos  hasta  que las  bases materiales del sistema y la dominación no sean destruidas, y hacerle frente a las políticas de devastación de la tierra, hasta que  nuestrxs hermanxs animales  humanxs y no humanxs salgan de las prisiones y todxs  podamos  tener  via   a la experiencia de la libertad.

Pero  no nos limitaremos  hasta que se den  estas condiciones, yo me siento vivo aquí  y ahora  y es aquí  donde inicio mis búsquedas  estando a la par con quienes luchan desde tantas  trincheras  no negándome a ellas  pero  tampoco desprestigiando las mías,  es ahí  donde inicia mi primera   revolución  para dar  rienda  suelta a las  pasiones indómitas y a veces   inmorales.


    

Dia de Acción por lxs prisionerxs Trans

El 22 de enero de 2016 será el primer año de un día de acción por lxs prisionerxs trans: un día internacional de acción en solidaridad con prisionerxs trans.
 
Este es un llamado a la acción contra el sistema que trata de borrar nuestra existencia. La supervivencia de personas trans y otras minorías sexuales no hace parte de una conversación pintoresca, sino de nuestra lucha por vivir en un mundo decidido a marginar, deshumanizar y criminalizarnos -especialmente a las mujeres trans, y especialmente, personas trans nativas, negras y latinas.

Se nos discrimina en todos los ámbitos de la sociedad, incluyendo la vivienda, la salud, el empleo. Nuestra supervivencia suele ser precaria y muchas de nosotras sobrevivimos con un trabajo criminalizado también, haciéndonos más un blanco para el acoso  policial, y el crimen de “caminar siendo trans.”

Una vez encarceladas, las personas trans se enfrentan a la humillación, al abuso físico y sexual, a la negación de suplir sus necesidades médicas, y a represalias legales. Muchas personas trans son puestas en confinamiento solitario durante meses o años, solo por ser trans. Las mujeres trans son puestas generalmente en cárceles de hombres, donde hay un riesgo mayor de sufrir violencia sexual.

Al igual que nuestras vidas son violentamente reprimidas afuera, las personas trans experimentan el sufrimiento y la muerte dentro de los muros de las cárceles, prisiones, centros juveniles y centros de detención para inmigrantes.

El día de acción por lxs prisionerxs trans del 22 de enero es un día para reconocer las experiencias de personas trans y de otras minorías sexuales. Es sobre colaboración. Es sobre forjar nuevas relaciones y desmantelar el aislamiento de la prisión. Es sobre resistencia a la violencia estatal. Es sobre solidaridad entre quienes experimentan la violencia del sistema de primera mano y para quienes el estado no ha llegado todavía.

Muchos grupos abolicionistas y de apoyo a presxs de todo el mundo hacen un excelente trabajo escribiendo cartas a prisionerxs, educando al público con cartas a editores y artículos para los medios, llevando a cabo protestas y marchas, la organización de las comunidades queer para hacer llamadas masivamente y exigir que lxs presxs trans sean tratadxs con respeto y dignidad, y por el fin de su detención. El día de acción por las personas trans tiene como objetivo hacer accesible este trabajo a cualquier persona que quiera apoyar -animamos a hacer vigilias para quienes en nuestras comunidades han sufrido la violencia estatal, a celebrar un evento, invitar ponentes, proyectar videos y realizar talleres para difundir el tema de las experiencias de lxs presxs trans, compartir conocimiento, y construir estrategias de resistencia. Hacer fiestas y recaudar fondos para las personas y grupos que ya están llevando a cabo un trabajo increíble. Actuemos. Unámonos y mostremos nuestra convicción de apoyarnos unxs a otrxs, poniendo fin a las prisiones de una vez por todas.

Este proyecto fue imaginado por primera vez por Marius Mason, prisionero trans de Texas, Estados Unidos. Desde entonces, a través de sus amigxs y su grupo de apoyo, un colectivo internacional de personas, dentro y fuera de los muros de la prisión se han unido para hacer del día de acción por lxs prisionerxs trans, una realidad. Somos personas trans y no-trans, amigxs y simpatizantes. Nos unimos en una larga tradición de personas queer y trans que resisten a la violencia estatal.
Únete a nosotrxs en la lucha por la libertad.
transprisoners.net